FISCHIA IL VENTO A LAMPEDUSA
SOPLA EL VIENTO EN LAMPEDUSA (*)

La noche del 3 de octubre de 2013 trescientas sesenta y ocho personas no vieron más el amanecer. Sobrecoge imaginar su desesperación ante la certeza de la muerte en las olas de la noche, el mar atenazó sus cuerpos, los arrastró al fondo para devolverlos ya sin vida. Originarias de de Eritrea, Somalia y Ghana, y embarcadas en Libia en busca de una vida mejor tristemente resultó ser la barca de Caronte.
Trescientas sesenta y ocho cadáveres fueron depositados en el muelle de Favoloro. Estremece imaginar el muelle lleno de cuerpos sin vida visto desde la puerta que nos impide pasar. Se siente el horror de estar tan cerca de un crimen contra la humanidad que no borra el tiempo.
El muelle Favaloro sigue siendo escenario de ese horror. Cientos de emigrantes han sido descargados, como mercancía en este muelle en los tres días que llevamos aquí.
No es solo el muelle de Favaloro, en toda la isla de Lampedusa está presente la tragedia de la migración truncada.
Tragedia irreparable de los naufragios en la proximidad de sus costas presente en el cementerio que guarda los cuerpos de tantas personas ahogadas, criaturas muchas de ellas.
Tantas historias de embarcaciones acosadas por patrulleras libias forzadas a regresar a ese país hoy de tortura.
Tantas decenas, incluso en un solo día, de pateras que llegan a puerto escoltadas por barcos del gobierno italiano y sus pasajeros alineados en el muelle para ser conducidos al centro de identificación para ser después encerrados en grandes naves-prisión, imponentes a escasos metros de la costa, donde pasar la cuarentena y posteriormente devueltos a sus países en muchos casos.
Demasiada frustración, demasiado sufrimiento innecesario provocado por la política migratoria de la Unión Europea.
La Puerta de Europa es un monumento dedicado «a los migrantes que perecieron mientras intentaban el viaje marítimo desde el norte de África a Europa» incluye en su remodelación un espejo para que «quien no esté de acuerdo con la recepción de migrantes reflexione y pueda mirar sobre todo dentro de sí mismo».

(*) Título de la canción del proyecto Lo dorado al exterior que indica la manera de arropar con una manta térmica.