En relación a los acontecimientos que se suceden en el Puerto de Bilbao, la plataforma ciudadana de apoyo a personas migrantes y refugiadas Ongi Etorri Errefuxiatuak manifiesta su rechazo frente a la actuación policial que ha tenido lugar esta mañana con el desalojo del campamento y la detención de un grupo de chicos que se encuentran en tránsito hacia el Reino Unido.
Resulta cruel destruir con excavadoras las tiendas de campaña que estos días han sido su único cobijo frente a la nieve y el frio. Amenazar con desplazar la actividad económica a otro puerto es una ingenuidad política o peor aún, un intento de manipular a la ciudadanía. Las personas migrantes van a seguir viniendo, y si el ferry se desplaza a otro puerto, ellas se desplazarán tras él, como antes se desplazaron desde Calais a Santurtzi. Levantar muros más altos solo sirve para aumentar el sufrimiento de las personas que están en tránsito, y la vergüenza de quienes lo levantan.
Las migraciones siempre han existido, los seres humanos nos movemos desde que existimos como especie. Lo que tenemos que atajar son las causas que provocan desplazamientos forzados, y que tienen que ver con un modelo económico depredador que expolia los recursos y expulsa a comunidades enteras de sus modos de vida. No es natural que las mercancías, el capital y las armas circulen libres mientras a las personas se las exija que mueran bajo las bombas que fabricamos, o de hambre porque las empresas transnacionales se han apropiado de sus recursos.
El PNV pide expulsar a los extranjeros que pongan en riesgo las infraestructuras básicas, cuando lo que es preciso expulsar es la xenofobia que ponga en riesgo la vida de las personas y la convivencia.
Creemos que nuestros gobiernos distorsionan la realidad cuando ven riesgo en un grupo de chicos refugiados en tiendas bajo la nieve, o en la llegada de menores extranjeros, y no así cuando un submarino militar atraca en el puerto «por sus razones técnicas» como hoy, o cuando los barcos Bahri cargan armamento mensualmente con destino a Arabia Saudi para hacer la guerra a la población yemení.
Hay que humanizar las migraciones, son personas con necesidades. Si están en tránsito tendremos que emplear recursos en poner un área de descanso, no en construir muros y en control securitario, que no nos olvidemos no nos sale gratis. Se está destinando muchos de nuestros recursos a enriquecer a los señores de la guerra, que ganan vendiendo armas que alimentan las guerras y a la vez levantando y «protegiendo» las fronteras de un pretendido enemigo.
En Ongi Etorri Errefuxiatuak tenemos claro que no vamos a caer en falsos discursos xenófobos, en la guerra entre pobres que algunos alimentan. Por eso insistimos en humanizar y acompañar a las personas que llegan, porque solo si las vemos como son, como personas, como iguales, estaremos orientando bien la cuestión. Si no, estaremos alentando políticas asesinas y sociedades caníbales. Todos los derechos para todas las personas.
Última información: de las 6 personas detenidas, han liberado a 5, mientras que a una persona la trasladan al CIE de Aluche en Madrid.
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